La nueva pornografía se caracteriza por su calidad de imagen, ser muy accesible y permitir varios niveles de interacción, genera millones de visitas por horas, mayoritariamente de jóvenes de sexo masculino. Estudios previos muestran evidencias de que el consumo de pornografía por parte de adolescentes y jóvenes condiciona sus actitudes sexuales. En Jóvenes e Inclusión queremos saber en qué medida y por eso hemos puesto en marcha una nueva investigación. Si tienes entre 16 y 25 años puedes ayudarnos cubriendo una breve encuesta anónima.
El consumo de pornografía genera un imaginario sexual a partir de lo que se ve en la red. Según distintos estudios internacionales, internet aporta respuestas satisfactorias a las inquietudes habituales de los jóvenes, por lo que ya casi no consultan a un adulto. El uso de pornografía produciría, por tanto, un efecto formativo distorsionador. Pero no solo eso, sino que parece estar relacionado con prácticas de riesgo como la presión sobre sus parejas sexuales o la presencia de actividades violentas.
Queremos conocer en qué medida las nuevas formas de producción y acceso a la pornografía pueden estar condicionando las conductas y hábitos sexuales de adolescentes y jóvenes. Si tienes entre 16 y 25 años y sea cual sea tu género, orientación sexual, situación formativa o laboral, puedes ayudarnos cubriendo una breve encuesta, de forma totalmente confidencial, pinchando en el siguiente enlace: Cubrir encuesta